Una sonrisa cuesta poco
y produce mucho.
No empobrece a quien la da
y enriquece a quien la recibe.
Dura sólo un instante
y perdura en el recuerdo
eternamente.
Es la señal externa
de la amistad profunda.
Nadie hay tan rico
que pueda vivir sin ella,
y nadie tan pobre
que no la merezca.
Una sonrisa
alivia el cansancio,
renueva las fuerzas
es consuelo en la tristeza.
Una tiene valor
desde el comienzo en que se da.
Si crees que a ti la sonrisa
no te aporta nada,
se generoso y da la tuya,
porque nadie tiene
tanta necesidad de la sonrisa
como quien no sabe sonreír.
Esta poesia me la ha enviado
1 comentario:
pues a sonreir se ha dicho!!!!
Publicar un comentario